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A ti, mujer, de otoño florecido,
serena madurez, risa festiva,
a ti que eres la suma positiva
de todas las mujeres que lo han sido.
A ti. Deseo, amor, consuelo, llanto,
remanso de ternura, fortaleza
que alivia de los hombres su tristeza
o causa sin remedio su quebranto.
A ti, que conseguiste alzar la frente
en esta sociedad que marginada
mantuvo tu ilusión, y liberada
demuestras ser en todo competente.
A ti, tan incansable a la fatiga
del mundo o de tu hogar, trabajadora,
recinto del amor, progenitora,
ejemplo maternal y esposa amiga.
A ti, mujer plural, bello dilema,
naufragio de los hombres, dulce puerto,
pecado redimido, cielo abierto
que libra nuestras almas de la quema.
Mujer que eres certeza entre lo incierto,
a ti va dedicado este poema.
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